No suelo volar por caminos angostos en donde los ojos se plagan de hostilidad entre el claro oscuro de mi perspicacia y sólo me acojo a ella cuando me dan un paso con el recuerdo amargo y ocioso.
Los riesgos de la maraña son faros apagados, una flecha arrojada a la costura desigual de mi falda en el arqueo torpe de unas extremidades que sujetan el roce.
El pase de salida se encarama en el broche de mis zapatos bajo el aliento de bosques centenarios, ahora no puedo bloquear las andadas.
Si la vida me sonríe por hacer trueques en el pasado la besaría por el gesto y diría que tengo miedo a la confusión, a veces no sé si somos de carne y hueso o arena y polvo en un punto y final.
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comentario(s):
Anónimo
dijo...
Me ha encantado el poema, Descalzo. Me gusta tu forma de tratar las palabras.
Es la primera vez, creo, que te visito. Y nada más entrar los primeros acordes (tenía los auriculares a volumen alto) de Creep, me han puesto la carne de gallina.
LA HABANA
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Desconozco si hay alguna sensación mejor a la de sus tacones subiendo la
escalera que da a mi casa. Dudo mucho incluso que haya melodía más afinada
que...
Móstoles
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Entonces llegó, algo más tarde que los demás, cuando pensábamos que no
haría acto de presencia, apareció con su camiseta negra, sus vaqueros
desgastad...
El resentimiento de la oveja negra
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Durante mucho tiempo aquel rebaño vivió tranquilo con su pastor, su perro,
sus 72 ovejas blancas y su única oveja negra, pero de pronto algunas ovejas
tam...
BLA BLA BLA
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Qué quieres
si vivimos entre
basura en bolsas de prada
chantajistas que te cepillan la merienda
si están llenan las calles
de reojos
vis a vises en matorrale...
- la vendedora de frutas- breves momentos (POEMA)
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*Dura lo que dura la visita de un pajarillo *
*en el alféizar de la ventana *
*pero me cambia la mañana.*
*Muchos amaneceres son lluviosos y vento...
De Botones y Un Corazón
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*Se me fueron abriendo las costuras de la memoria: *
*ya me estaba acostumbrando a vivir sin ti.*
*Pero tus fragmentos estallados se han ido*
*buscando,...
Hace 14 años
Dicen que sonríes en la soledad y que de noche hablas a escondidas, que cantas y bailas con los espejos esperando alguna respuesta del tiempo. Dicen, dicen, pero tú no dices nada. De tanto callar, tú ya no dices nada. DELUXE.
Sin ser, me vuelvo duro como una roca si no puedo acercarme ni oír los versos que me dicta esa boca. Y ahora que ya no hay nada, ni dar la parte de dar que a mí me toca, por eso no he dejado de andar. Extremoduro
DISCIPLINA SECRETA
La casa como barco en alta mar de junio.
Las calles como trenes de noche sosegada.
Estas cosas no pasan en el mundo.
Estoy por afirmar que ahora vivo en un libro de poemas.
Pero si tú me miras, decidida a existir desde el fondo templado de tus ojos, también existe el mundo.
Y muy probablemente yo acabaré por existir contigo.
2 comentario(s):
Me ha encantado el poema, Descalzo.
Me gusta tu forma de tratar las palabras.
Es la primera vez, creo, que te visito. Y nada más entrar los primeros acordes (tenía los auriculares a volumen alto) de Creep, me han puesto la carne de gallina.
Un beso.
Carlos Maleno.
Es una canción que es casi de otro mundo, me fascina.
Gracias Maleno, tengo que decir que me sorprende tenerte aquí y para nada me desagrada.
Un beso.
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